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3 de julio de 2025

Situación del Grupo Los Palmeras

La confirmación de que Rubén Cacho Deicas ya no forma parte de Los Palmeras generó un cimbronazo entre los fans del popular grupo de cumbia santafesina. Si bien el comunicado oficial fue escueto y conciliador, una serie de revelaciones hechas en las últimas horas por el periodista Juan Etchegoyen encendió la polémica.

"Quisieron bajarle la espuma a un volcán en erupción", disparó Etchegoyen, quien afirmó tener información directa del entorno de Cacho Deicas. Según su relato, la salud del cantante lo obligaba a limitar su agenda a solo dos shows por mes, algo que no habría sido respetado por la banda. En ese contexto, se habría decidido poner fin a su participación activa.

"Desde marzo no le consultaron más nada sobre el grupo y, lo más grave, es que desde hace meses no recibe su parte del dinero generado por la banda", aseguró el periodista.

Además, mencionó un conflicto familiar latente: "El odio que la familia de Cacho le tiene a Marcos trascendió incluso al propio Cacho", añadió, dando a entender que la relación personal también estaba muy deteriorada.

¿Qué dice el entorno de Cacho Deicas?

De acuerdo con fuentes cercanas al artista, Cacho Deicas había dado el visto bueno para que Los Palmeras siguieran tocando sin él, pero esperaba seguir cobrando su parte como socio fundador del grupo. Eso no habría ocurrido: "Le dejaron de pagar lo que le corresponde", denunció Etchegoyen.

Estas declaraciones plantean un panorama muy diferente al comunicado oficial emitido por la banda, que hablaba de una salida respetuosa y consensuada. El periodista, sin embargo, sostiene que lo que se busca es "ocultar una situación interna grave que se arrastra desde hace meses".

Una historia con final abierto

Por ahora, Cacho Deicas no hizo declaraciones públicas más allá de su breve posteo en redes sociales, donde agradeció el cariño del público. La incertidumbre sobre su futuro musical -y el impacto que esta ruptura tendrá en la banda- sigue generando repercusiones.

Lo que queda claro es que el alejamiento de uno de los íconos de Los Palmeras no fue tan pacífico como se intentó mostrar, y que la historia está lejos de haber terminado.

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