La Municipalidad de San Francisco realizará la compactación de más de 450 vehículos retenidos en malas condiciones a fin de contribuir a la descontaminación y liberar el depósito municipal.

“Hoy el municipio tiene una enorme cantidad de vehículos secuestrados y, desde el Tribunal Administrativo de Faltas que forma parte de la Secretaría de Gobierno, se hizo un trabajo muy intenso e interesante durante muchos meses para adherir al Programa Nacional de Descontaminación, Compactación y Disposición Final de Automotores (PRO.NA.COM.) y al Sub-Programa Transformemos”, explicó el secretario municipal de Gobierno Damián Bernarte.

“Tenemos colapsado el centro de depósito de vehículos, por lo que hemos previsto realizar la compactación de 61 automotores y 395 motocicletas”, agregó el funcionario, quien además explicó que “desde la Municipalidad de San Francisco adherimos al Programa Nacional de Compactación y, a partir de allí, las empresas que tienen asignadas el Gobierno de la Nación que se dedican a esta actividad vienen con las máquinas compactadoras y realizan este proceso con enormes prensas”.

Si bien aún no existe una fecha determinada para llevar a cabo la compactación “estamos en las etapas finales del cumplimiento de requisitos formales para poder establecer una fecha de realización”, dijo.

El secretario contó que esta empresa compactadora le paga al municipio por tonelada compactada de metal y la municipalidad, como parte del convenio, tiene la obligación de destinar el producido de la compactación a una institución de bien público de la ciudad, que en el caso de esta primera experiencia se decidió que sea la Sociedad Bomberos Voluntarios de San Francisco.

“Hay un triple beneficio ya que por un lado se liberan los depósitos municipales, además estos elementos secuestrados dejan de actuar como un factor potencial de contaminación ambiental, por lo que se genera una mejora en los parámetros de sustentabilidad de la ciudad, y por último el círculo cierra con que el producido de la compactación termina en manos de una institución emblemática como son los Bomberos Voluntarios”, sostuvo.

Además, Bernarte valoró el trabajo llevado a cabo por el Juzgado de Faltas ya que “fueron meses muy largos de negociaciones y cumplimiento de requisitos con el Ministerio de Justicia de la Nación, adecuación normativa y por ende un importante trabajo también por parte del Concejo Deliberante de la ciudad”.

También irán al proceso de compactación más de 100 caños de escapes antirreglamentarios secuestrados en el último año. 

El secretario de Gobierno destacó que esta “es la primera experiencia de este tipo que tendremos en la ciudad. En futuros procedimientos que hagamos más adelante podremos designar a otra institución de bien público que se beneficie con lo producido con la compactación”.

Vale indicar que el Decreto Nº 360/21 autoriza al Departamento Ejecutivo Municipal, a través del Tribunal Administrativo de Faltas, a gestionar la descontaminación, compactación y disposición final como chatarra de los automotores, motovehículos, ciclomotores, otros rodados y sus partes que hayan sido secuestrados y/o retirados de la vía pública y que hubieran permanecido por más de seis (6) meses retenidos y/o depositados en predios municipales. 

Los titulares o quienes se creyeren con derecho sobre los bienes que se publicarán próximamente en un edicto podrán comparecer ante el Tribunal Administrativo de Faltas de San Francisco sito en calle Cervantes Nº 3657, en el PLAZO DE QUINCE (15) DIAS CORRIDOS desde la publicación del edicto, con la documentación que justifique el derecho pretendido a los fines de retirar la unidad, previo pago de la sanción administrativa y gastos que en el caso correspondan (traslado y estadía), bajo apercibimiento de continuar el procedimiento de descontaminación, compactación y disposición final como chatarra respecto de los mismos.

Por último, Bernarte acentuó que además de la ocupación de espacios físicos imprescindibles para el municipio, tener esta gran cantidad de vehículos secuestrados “significa una importante erogación de recursos económicos y humanos como el pago de servicios de fumigación, limpieza, vigilancia y seguridad, entre otros”. Asimismo -prosiguió- la mayoría de estos vehículos, por las condiciones en que se encuentran, representan un peligro para el medio ambiente y la salud por resultar posibles focos de contaminación”.