Una de las grandes dudas es la responsabilidad de los productores donde se origina la cadena con la entrega de animales muertos o en condiciones irregulares para su comercialización. Todavía no se conocieron detalles de la sanción que le cabe al productor rural que introduce a sabiendas el animal en mal estado.   “Había diferentes fuentes para la búsqueda de carne como vacas muertas, vacas que no pasaban por frigorífico, faena clandestina o abigeato”, comentó Andrés Balkenende veterinario del SENASA, agregando que el sistema tenía algunos centros de operaciones como en Colonia San Pedro.   Comentó que desde allí se distribuía a otro centro de acopio en Frontera donde se desguazaba el animal y se pasaba diferentes productos químicos, como sulfito y cloro o lavandina.   “A la carne la tenían en cámaras rompiendo las cadenas de frío. Un ilícito bastante grande de gente que no tiene bastante conciencia del daño que pueda causar”, detalló.   Balkenende, sostuvo: “La investigación sigue. Comenzaba con la compra o directamente el robo de animales en los campos. Y desde Frontera se comercializaba generalmente molida porque era más difícil darse cuenta”.   “En Frontera tenían medidas higiénicas y sanitarias terribles. Es muy grave”, consideró.   “A la gente como consejo, tratar de ir a lugares certificados que inspire confianza. No comprar carne picada que no se la piquen en el momento”, dijo.   Mucho se vendía como carne picada porque la otra carne es más difícil de disimular.   En cuanto a los resultados de la justicia hay que esperar un poco más. Si bien en carnicerías de San Francisco no secuestraron carne con sulfito o cloro. Pero están investigando escuchas y otros datos al respecto.   Afirmó que podría haber más comercios y más localidades involucradas. Esto fue un llamado de atención para todos aquellos que iban por un camino desviado.   Balkenende manifestó que no hay muchos antecedentes de procedimientos de estas características pero venían operando hace un tiempo.   Cabe recordar que por el momento no hay personas detenidas.   Cinco imputados por la causa de la venta de carne en mal estado   Son cinco los imputados tras los nueve allanamientos del mes de mayo que Gendarmería Nacional realizó en San Francisco, Frontera (Santa Fe) y Colonia San Pedro, al norte del departamento San Justo, operativos en los cuales se secuestraron casi 3 toneladas de carne en mal estado.   Los imputados son Sergio Valle y sus dos hijos; una persona de apellido Novara apodado «el tuerto» y un tercero, de apellidado Besuzo.   Se aguarda que en los próximos días estas personas sean llamadas a prestar declaración indagatoria y allí se conocerá qué imputación les cabe.   Al primero de los mencionados le habrían secuestrado una importante cantidad de vehículos, en su mayoría camionetas, las que habrían sido utilizadas para el transporte de la carne desde la zona de Colonia San Pedro hasta Frontera. Además de los vehículos se han secuestrado tambores de aceite de 20 litros y varios freezers.   A estas personas se las investiga como presuntos infractores a los artículos 200 y 201 del Código Penal que se refiere al delito de envenenamiento del agua y adulteración de alimentos, que contempla una pena que va de los tres a los diez años de prisión.