De esta manera, rechazará el pedido de excarcelación efectuado por la defensa del acusado.

"Existen muchos indicios que lo vinculan al asesinado del ginecólogo", aseguraron desde la fiscalía, mientras avanza la investigación y suman testimonios. Mientras tanto, el arma homicida y el teléfono celular del médico continúan sin aparecer. Alberione investiga la versión de un testigo que dio cuenta que tiempo antes de la desaparición y crimen, le entregó a Gette un arma de fuego calibre 22, el mismo calibre de la bala que mató a Casermeiro el 19 de diciembre en un campo a la vera del viejo camino a Estación Luxardo, en cercanías de San Francisco.

Los forenses determinaron que a Casermeiro lo mataron el mismo jueves que desapareció de un balazo en la nuca. En la escena del crimen no se hallaron signos de arrastre ni otras marcas que hicieran presumir que el cuerpo hubiera sido movido de lugar.

Por lo general, los sicarios suelen utilizar armas más potentes y letales, por lo que por el momento no se sospecha de que el crimen del médico haya sido por encargo.

Gette está preso en la cárcel local como supuesto autor del delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y por la alevosía En enero, frente al fiscal negó los hechos y se abstuvo de declarar.

Para el fiscal, el crimen fue por un móvil económico. Casermeiro y Gette -dedicado a la actividad agropecuaria- habrían compartido algunos negocios.